Construcción básica de la huerta paso a paso



¿Qué necesitamos para construir una huerta?
 
Buena exposición al sol: Es aconsejable orientar la huerta hacia el norte, para una buena exposición del sol, que debe ser de al menos 5 hs al día. Lejos de objetos que le hagan demasiada sombra (paredes, árboles frondosos, construcciones)
Cerco perimetral. Para impedir que ingresen animales (el cerco puede ser de  alambre, cañas, palos, ramas, etc.). Una opción muy interesante es construir un cerco vivo, sembrando ciertas plantas alrededor de él:
Invierno: habas y arvejas, con algunas aromáticas (cilantro, salvia) y flores.
Verano: maíz y poroto, con algunas aromáticas (albahaca, lavanda, orégano, menta, peperina, salvia, etc.) y flores.
Esto nos ayudará a crear una protección natural contra los insectos plagas y servirán de alojamiento de enemigos naturales.
Fuente de agua cercana. El agua destinada para riego debe ser agua apta para consumo, proveniente de una bomba, canilla, canal, estanque cercano.
Semillas y Herramientas

¿Cuanto terreno necesito?
Con cuatro o cinco canteros de unos 1,2 m alcanzan para cubrir las necesidades de una familia tipo. Pero se puede sembrar utilizando cualquier espacio disponible, hasta en balcones!!

¿Qué suelo tengo?
Una manera casera de determinar la textura del suelo consiste en tomar pequeñas muestras de suelo húmedo y tratar de amasarlas y hacer bolitas o chorizos, y sacudirlas dentro de la mano. Si se desarman estaremos frente a un suelo arenoso, si permanecen intactas, el suelo tendrá mas arcilla o limo: si al aplastar la pelotita se desarma, el suelo es más limoso y si se puede moldear como plastilina, será más arcilloso.
La mayoría de las plantas se beneficia con suelos muy sueltos y arenosos, cuyo único defecto (el de retener menos agua y nutrientes), puede solucionarse con el agregado de materia orgánica utilizando por ejemplo el compost.



¿Cómo labrar y proteger la tierra?
Se utiliza la labranza vertical, para no dar vuelta la tierra y romper la estructura del suelo.
Si el terreno está seco, hay que regarlo y si está muy húmedo, esperar a que la tierra no se pegue a la pala. Primero se limpia el terreno. Luego se clava una pala u horquilla con el pie, se retira el primer pan de tierra y luego cada 5 cm se repite la operación pero sin retirar los panes de tierra y llevando el mango hacia delante y atrás cada vez. Luego desmenuzamos los terrones grandes de tierra con la azada y rastrillamos para dejar la superficie pareja.
La tierra se debe proteger, antes y después de sembrar, con el uso de mantillo, acolchado o “mulching” que consiste en cubrir la superficie del suelo con material orgánico con 3 funciones principales:
  • Conservar la humedad y disminuir la frecuencia del riego
  • Proteger las raíces de la temperaturas extremas
  • Evitar el desarrollo de malezas
Los materiales utilizados para el mantillo pueden ser paja, hojas secas, pasto cortado, o la fracción mediana del compost.

¿Existen recomendaciones para el uso del compost?
(Para informarse sobre su preparación, consultar Abonos ecológicos en la sección Páginas del blog, de este blog)

Como idea aproximada,  podemos incorporar una carretilla de abono cada 4 o 5 metros cuadrados de cantero.
Es altamente preferible que el compost se realice con abonos orgánicos que provengan de explotaciones en las que los animales no hayan sido tratados con antibióticos, ya que los mismos inhiben el desarrollo de microorganismos benéficos, provocando así una descomposición no deseada de la materia orgánica

ES IMPORTANTE NO UTILIZAR COMPOST INMADURO YA QUE DE ESTA FORMA SE ESTARÍA ADICIONANDO AL SUELO SUSTANCIAS TÓXICAS!

Area de la compostera
El terreno debe ser llano y con buen drenaje. No se debe inundar luego de una lluvia.
Que esté cerrado a la entrada de animales. Hay que tener especial cuidado con las aves.
Agua accesible
Sombra en verano
Que no esté expuesta a vientos excesivos

¿Qué y como sembrar?
La primera gran división de los cultivos de huerta es la de cultivos de verano y de invierno. Eso nos lleva a  agruparlos en 2 períodos de siembra: otoño y primavera.
También encontramos cultivos que pueden sembrarse todo el año (como lechuga y zanahoria) y otros perennes (como alcahuciles y espárragos).
De acuerdo al cultivo, la siembra será “directa” o “en almácigo”.
Siempre es conveniente consultar los calendarios de siembra otoño-invierno y primavera- verano antes de sembrar cualquier especie. (ver Calendarios de siembra y Calendario Biodinámico en la sección Paginas del blog, de este blog)

Las semillas de cáscara dura se beneficiarán con un remojo previo a su siembra, que podrá durar entre 2 y 10 hs. Esto permitirá que se ablanden y germinen más fácilmente.
La profundidad de siembra es aprox. 3 veces el tamaño de la semilla.
Los tiempos de germinación varían entre 3 y 20 días, de acuerdo a la especie y la temperatura. Pasados 30 días desde la siembra, si nada ha germinado habría que empezar el proceso nuevamente y ver en qué paso pudo haber fallado.

Siembra directa: Se siembran en forma directa sobre el terreno, las especies de semillas grandes o que no toleran el transplante. Para la siembra directa se debe preparar muy bien el suelo (desmenuzarlo y abonarlo previamente)


 Siembra en almácigo: Se utiliza para darle cuidados especiales (controlar mejor el riego y proteger del frío o calor excesivos por traslado o cobertura) a las semillas más pequeñas o delicadas. Utilizar recipientes capaces de contener entre 5 y 10 cm de tierra fina mezclada con abono compuesto fino o una mezcla de perlita + turba y/o vermiculita.

Se debe tener presente que el almácigo puede fallar por falta de luz, calor o frío excesivo, exceso o falta de agua, siembra muy profunda, o uso de semillas viejas sin poder germinativo.

El transplante del almácigo al terreno definitivo se realiza cuando las plantas tienen 3 ó 4 hojas en el caso de verduras de hoja ó cuando el tallo llega al grosor de un lápiz en el caso de tomates, berenjenas, pimientos, cebollas o puerros. Es preferible hacerlo al atardecer y en días nublados.

Pasos a seguir para el transplante:
Regar el almácigo.
Extraer las plantas de a una, con una cuchara con cuidado de no desprender la tierra de las raíces.
Abrir agujeros en la tierra y regar.
Colocar los plantines y tapar con abono compuesto presionando con ambas manos.
Regar y cubrir con pasto seco la tierra.


¿Cuales son los cuidados y labores de la huerta?

Abonos. Su preparación es un trabajo continuo. Siempre debemos tener abono para la temporada siguiente. (ver Abonos ecológicos en la sección Páginas del blog de este blog)

Riego. No debe ser escaso (reduce la producción y las plantas pueden semillar antes de tiempo) ni excesivo (produce enfermedades y frutos de mala calidad). Como estimativo se pueden utilizar 3 a 5 litros por m². En verano regar todos los días y por la tarde para que el sol no “queme” nuestros cultivos. En invierno no hace falta regar tan seguido y es preferible hacerlo al mediodía para que las heladas no dañen las plantas. Siempre regar en forma de lluvia fina mediante regadores manuales. También se puede utilizar el goteo o la microaspersión.

Protección contra el frío y calor excesivos. Cuando el calor es muy fuerte podemos proteger los cultivos con techos de ramas, arpillera o media sombra, que sean removibles.
Contra el frío podemos utilizar los siguientes recursos:
Tuneles de polietileno: Se construyen utilizando como armazón cualquier material flexible. Ventilar diariamente para evitar enfermedades.
Chapa traslucida acanalada : No se dobla ante granizo o lluvias fuertes
Botellas de plástico cortadas en su base (para pequeños plantines): Durante el día puede sacarse la tapita, para que la planta tenga más oxígeno.

Control de plagas (ver Manejo de plagas y enfermedades en la sección Páginas del blog, de este blog)

Otras labores:
Raleo. Consiste en dejarle a las plantas lugar para que crezcan, eliminando a las plantitas que hayan crecido muy juntas en los almácigos o cuando realizamos siembra directa. Al hacer esta labor, el suelo debe estar húmedo. Debemos tirar suavemente y si la planta sale con mucha raíz se puede replantar. Los raleos de zanahoria, remolacha y nabos pueden consumirse como miniaturas.
Tutorado: Ciertas plantas (como los porotos arvejas, habas y tomates) necesitan una guía en la cual enramarse o sostener el peso de sus frutos.
Desbrotes: Se eliminan los brotes que crecen en las axilas de los tomates, para fortalecer los que quedan.
Aporcamiento de tierra: Hay que arrimarle tierra con la azada o pala a las matas de maíz cuando tienen 30 cm de altura